Como le gusta a la joia la estufa. Estos días de frío cuando no le acercaba su camita ella misma se ponía delante del calorcito para volver a su cama. Aquí ya le he acercado al fuego, así que ella sólo tiene que acostarse y acomodarse.
Anda que no esta a gustico en mi casa, nada que ver con la fría calle de donde la cogí.