En un país multicolor las opiniones deberían ser respetadas
siempre que no atenten contra la libertad de otros.
Con esto del referéndum no sé si posicionarme o no, porque
lo mismo me cierran este humilde blog sólo por decir que sí a un referéndum. Como
ya
se han bloqueado más de 140 webs a favor del referéndum catalán. Cosa
bastante inútil, ya que se pueden reabrir fácilmente en otros sitios webs. Eso
sí, la web de la fundación francisco franco sigue abierta, no pasa nada por
ensalzar la dictadura.
Ese es un gran problema de España, los franquistas que
todavía están en las instituciones (jueces, políticos, empresarios, militares, no todos son franquistas pero haberlos haylos).
Por eso, soy de la opinión de que lo
mejor sería una movilización masiva a votar el 1 de octubre, y votar no.
Votar para demostrar a los pseudodemócratas del gobierno de España que un referéndum
es democracia, y votar no para
darles a los pseudodemócratas catalanes que no quieren una declaración
unilateral de independencia de esta forma, donde más parece que quieren
esconder sus vergüenzas y corrupciones los políticos catalanes. Y que quede claro que este referéndum no me gusta, no se ha hecho bien, y los medios de comunicación españoles y catalanes están creando un ambiente de tensión que favorece la confrontación.
Para los que se les llena la boca de que este es un estado
de derecho y una democracia madura, les pongo unos ejemplos que demuestran
claramente que España no es una democracia de verdad:
En una democracia de verdad no
se encarcela durante 5 días a unos titiriteros por una obra de marionetas,
cómo mucho se les lleva a comisaria a que declaren, pero 5 días encarcelados es
propio de dictaduras.
En una democracia de verdad no
se condena a nadie por publicar chistes en redes sociales. En mi opinión
publicar esos chistes son de mal gusto porque pueden ofender, creo que eso
queda para la intimidad y a quien le gusten los chistes negros y que sean
ingeniosos, y yo no publico eso porque lo prefiero para la intimidad. Además, si a una víctima como Irene Villa no le ofenden los chistes, no sé por qué ofenden tanto a otras personas.
Queda claro que a España le queda mucho por recorrer para
ser una democracia de verdad. Luchemos por eso, y por perdamos la sensatez ni
abracemos la histeria por lo que pasa en Cataluña.
Algún día habrá referéndum legal y pactado en este país
multicolor.